Supervisión Sexológica

• Los procesos de intervención.
• Los modelos de intervención.
• Las actitudes sociales del contexto de intervención hacia el sexo.
• Las actitudes emocionales de la persona supervisada hacia el sexo.

• Intervención social: supervisión de servicios, programas y proyectos de formacion y de atención en materia de violencia (violencia de género, violencia sexual, violencia intrafamiliar, violencia filio-parental), reinserción, exclusion social, salud mental, adicciones, etc.
• Ámbito clínico: Supervisión Sexoterapéutica individual y de pareja.

La práctica supervisada está orientada a profesionales de la sexología que están empezando a ejercer su profesión, a las que recién están incorporando la mirada sexológica a su área de intervención o a las que se dedican a la sexoterapia individual como de pareja. Se trata de un escenario clínico-formativo y un proceso generativo y transformador en el cual las personas desarrollan sus competencias.

La supervisión tiene como objetivo reflexionar sobre la propia práctica educativa, comunitaria o terapéutica en materia sexológica.

Se trata de un escenario de orientación y formación, así como un proceso generativo en el cual las y los profesionales del ámbito socio-sanitario desarrollan unas competencias básicas en materia sexológica en relación con su ámbito de actuación. Mediante la práctica supervisada se dota y se garantiza una atención a la sexualidad y a la violencia sexual integral y de calidad.

El objeto de esta supervision es, por un lado, transversalizar el enfoque sexológico en las áreas de intervención consultadas en general y, en concreto, en el proceder de las personas supervisadas. En resumen, posibilitar la atención profesional de una parte fundamental del bienestar de las personas.

En la práctica clínica cada cliente require de una intervención específica e individualizada.  Por lo tanto, cada terapeuta require de una formación especializada y supervisada. La supervision de casos, supone una herramienta eficaz para aumentar las estrategias clínicas del terapeuta y aportan una vision de apertura. En ellos se trabaja la parte técnica y metodológica como la contratransferencia, además de la gestion de las propias emociones. La supervision de casos ofrece la posibilidad de resolver dudas, encauzar casos, solucionar el estancamiento, potenciar habilidades terapéuticas, compartir recursos y estrategias y analizar con perspectiva la relación terapéutica. Todo ello, tanto en los primeros años de vida profesional como teniendo una larga trayectoria profesional.

El objetivo de la supervisión de casos es activar los recursos interaccionales de las personas consultantes para que amplíen y complejicen sus posibilidades de relación y sean un instrumento de reflexión, cambio y crecimiento mas versátil y efectivo.